Oliver Reed, el carismático actor británico que interpretó al aguerrido Antonio Próximo en «Gladiator», encontró un final tan dramático como la película que estaba filmando. Su deceso, ocurrido en mayo de 1999 en la isla de Malta, conmocionó a Hollywood y dejó una huella imborrable en la historia del cine.
Un espíritu indomable
Reed era conocido por su intensa personalidad y su amor por la vida. Su estilo de actuación era visceral y apasionado, y su reputación de ser un hombre duro y bebedor lo precedía. Durante el rodaje de «Gladiator», estas características se hicieron aún más evidentes.
La noche fatal
La noche del 2 de mayo de 1999, tras una larga jornada de filmación, Reed se dirigió a un bar local en Malta. Allí, en un ambiente relajado, se enfrascó en una amistosa competencia de bebida con algunos miembros de la tripulación. La noche transcurrió entre risas y camaradería, pero la celebración se tornaría trágica.
Según los relatos, Reed, siempre dispuesto a un desafío, retó a beber a varios marineros de la Royal Navy. La competencia se prolongó durante horas, y el actor consumió una cantidad considerable de alcohol. Al final de la noche, Reed se sintió indispuesto y se retiró a un rincón del bar. Allí, se desplomó y falleció instantáneamente debido a un ataque al corazón.
Un final abrupto
La noticia de la muerte de Oliver Reed conmocionó al equipo de producción de «Gladiator». El director Ridley Scott, quien había trabajado estrechamente con Reed, quedó profundamente afectado por la pérdida de su amigo y colaborador. La filmación se detuvo brevemente mientras el equipo se recuperaba de la conmoción.
Los productores se enfrentaron al desafío de completar la película sin la presencia de Reed. Utilizando una combinación de tomas ya grabadas, dobles de cuerpo y efectos visuales, lograron finalizar la película y rendir un homenaje a su fallecido actor.
El bar donde falleció Oliver Reed durante el rodaje de «Gladiator» cambió su nombre en su honor.
Originalmente, se desconoce el nombre del establecimiento. Sin embargo, tras la trágica muerte del actor, fue rebautizado como «Ollie’s Last Pub» (el último pub de Ollie, en español), en un conmovedor homenaje al carismático intérprete.
Este cambio de nombre no solo sirve como un recordatorio del lugar donde ocurrió el desafortunado suceso, sino también como un tributo a la figura de Oliver Reed y su legado en el cine.
Un legado imborrable
A pesar de su trágico final, Oliver Reed dejó una huella indeleble en el cine. Su interpretación de Antonio Próximo en «Gladiator» es considerada una de sus mejores actuaciones, y su presencia en la pantalla sigue siendo recordada por los fans del cine épico.
La historia de la muerte de Oliver Reed es un recordatorio de la fragilidad de la vida y de las consecuencias que pueden tener nuestros excesos. Sin embargo, también es un testimonio del apasionado y carismático actor que dejó una marca indeleble en la industria del cine.